Cuando yo iba al colegio, en el momento de hacer algún dibujo de una persona siempre soliamos decir "¿me pasas el color carne?" . Ese color siempre era uno, siempre era el mismo y eso siempre era lo normal.
Hoy, bastantes años después, con los colores Crayola, se pretende reflejar la multiculturalidad que está presente en nuestras vidas.